Este artículo fue traducido por Soribel Almonte desde un reportaje original de Fiona Roy. To read this story in English, click here.
Un investigador académico de la Universidad de Maryland ayudará a dirigir un proyecto piloto cuyo objetivo es hacer los departamentos de matemáticas en toda la nación más diversos, equitativos e inclusivos para los empleados, facultad y estudiantes.
Scott Wolpert, un profesor emérito de matemáticas en esta universidad colaborará con tres otros supervisores de proyectos para dar orientaciones de diversidad, equidad e inclusión a seis consultores en los departamentos de matemáticas y estadísticas de instituciones a nivel universitario por todo el país. El proyecto empezará en el 2024 y durará dos años para ayudar a estas instituciones a modificar sus departamentos de matemáticas y proporcionar un espacio más diverso y amable.
La estructura del proyecto y procedimientos son originarios de Transforming Post-Secondary Education in Mathematics, una organización que se esfuerza por mejorar la educación de matemáticas a nivel universitario.
Asociándose con American Association for the Advancement of Science’s STEM Equity Achievement Change iniciativo, TPSE Math creó un documento que le da a los departamentos de matemáticas en cada institución la oportunidad de reflexionar en sus procedimientos actuales de DEI. Además, el documento tiene opciones de entrenamiento de DEI o modificaciones para sus programas.
“En TPSE Math, estamos enfocados en incluir a toda la comunidad nacional de matemáticas y lo estamos logrando. También estamos enfocados en ver hacia dónde la comunidad de matemáticas en conjunto necesita ir y dónde necesita progresar”, dijo Wolpert.
En muchas universidades alrededor del país, incluyendo esta universidad, el departamento de matemáticas es la unidad educativa más grande en todo el campus, según Wolpert. Pero debido a los orígenes de esta materia, los cuales provienen de la educación universitaria tradicional, los departamentos de matemáticas tienen un historial de solo enseñar a un grupo demográfico limitado, Wolpert señaló.
“El mundo ha cambiado, la vida ha cambiado. La comunidad de matemáticas a nivel nacional necesita actualizarse al año 2023 con consideración a quién está enseñando”, dijo Wolpert.
En 2022, el porcentaje de estudiantes que recibieron una licenciatura del departamento de matemáticas en esta universidad era 74.9 por ciento hombres y 40.5 por ciento blancos.
Jason Lott, un estudiante de tercer año de matemáticas y ciencias de la computación, dijo que ha visto cómo las matemáticas y otras áreas en ciencia, matemáticas, tecnología e ingeniería son generalmente dominadas por hombres y una mayoría blanca, y él cree que las orientaciones de DEI pueden ser beneficiosas para estos departamentos.
“Es mucho más importante para estos departamentos recibir las orientaciones para que todos se sientan bienvenidos y que puedan triunfar en estos departamentos”, dijo Lott.
Meenakshi Krishnan, co-presidenta de la organización Mujeres en Matemáticas, dijo que las matemáticas es un área dominada por hombres porque debe haber cambios sistemáticos en la educación.
Krishnan, quién es un estudiante de doctorado de tercer año en matemáticas aplicadas y computación científica, dijo que mientras más una persona avanza en su educación en matemáticas, suele haber menos mujeres y otros géneros subrepresentados. Es importante crear un ambiente que pueda recibir a personas las cuales previamente no han continuado educación superior en matemáticas, dijo Krishnan.
“Las ciencias y las matemáticas en sí son importantes para el desarrollo global, y las instituciones están restringiéndose al rechazar estudiantes talentosos al no dejarlos que trabajen en CMTI y al no motivarlos a trabajar en CMTI”, dijo Krishnan. “Al controlar el acceso a estas áreas, las instituciones están realmente reduciendo la innovación”.
“El proyecto piloto, fundado por una donación de $600.000 de la Fundación Nacional de Ciencia, se enfocará en seis instituciones a nivel universitario”, dijo Wolpert. Facultad, empleados y estudiantes en estas instituciones recibirán orientaciones en tutoría, desarrollo profesional, más representación en el currículo, apoyo a los padres y guardianes, normas acerca del acoso sexual y más.
Para Krishnan, iniciativas como este proyecto piloto proveen esperanza a más diversidad en las matemáticas.
“Realmente espero que esto signifique que veamos a más personas de géneros subrepresentados escogiendo las matemáticas y CMTI cómo sus carreras y que se sientan cómodos en ese lugar”, dijo Krishnan. “Un ambiente más dinámico resultará en nosotros haciendo ciencia mejor porque no estaremos escuchando la opinión de un solo grupo demográfico”.