Este artículo fue traducido por Camila Santiago Díaz sobre el reportaje original escrito por Akshaj Gaur. To read this story in English, click here.

Un plan de límites escolares controvertido que cerraría tres escuelas del condado de Prince George en los próximos dos años provocó un debate intenso en dos audiencias públicas en octubre.

La propuesta, denominada “Iniciativa Integral de Límites Escolares”, aspira a abordar la creciente población estudiantil en todo el condado al equilibrar las escuelas con matrícula insuficiente y matrícula excesiva.

Las Escuelas Públicas del Condado de Prince George están programadas para agregar más de 9.000 espacios para 2027 a través de nuevas escuelas y renovaciones en escuelas existentes. El plan exige el cierre de tres escuelas y la transición de sus poblaciones estudiantiles a las escuelas nuevas y renovadas.

Según el proceso de cierre gradual propuesto, se espera que la Escuela Primaria Pointer Ridge y la Escuela Primaria Concord cierren en 2023, y la Escuela Primaria Rose Valley está programada para cerrar en 2024.

Rhianna McCarter, la gerente de límites escolares de PGCPS, informó en un correo electrónico que los tres factores determinantes del plan eran reducir los extremos de la utilización escolar, crear límites para nueve escuelas nuevas y renovadas e identificar escuelas primarias para consolidación para modernizar el inventario de los edificios antiguos del distrito.

Sin embargo, los padres y maestros afectados por los cambios de los límites dijeron que el plan aumentaría el tamaño de las clases que ya son grandes en el condado y exacerbaría aún más las brechas de aprendizaje causadas por la pandemia de COVID-19.

En las dos audiencias públicas que se llevaron a cabo el 20 de octubre y el 25 de octubre de este año, se manifestaron más de 80 comentarios públicos de residentes del Condado de Prince George.

Zandra Brown, una residente y miembro del personal de la Escuela Primaria McCormick, dijo que el plan pasa por alto el desarrollo residencial que rodea a la Escuela Primaria Pointer Ridge. El plan de límites agregaría 1.547 unidades residenciales y más de 3.240 niños al área de zonificación.

Brown argumentó que la consolidación de Pointer Ridge dejaría espacio insuficiente en el sistema escolar para los estudiantes que viven en el nuevo complejo y aumentaría innecesariamente el tamaño de las clases de otras escuelas en el área, incluida la Escuela Primaria Northview.

Kendra Gatto, una especialista en lectura y coordinadora de pruebas en la Escuela Primaria Pointer Ridge, dijo que cerrar Pointer Ridge aumentaría aún más la escasez de transporte del condado.

“Las tres escuelas que recibirán a nuestros estudiantes [de Pointer Ridge] están a cinco o siete millas de distancia”, dijo Gatto. “Estamos teniendo una escasez de conductores de autobús en este momento. ¿Por qué crear más necesidad de transporte? Todos los estudiantes que actualmente caminan necesitarán transporte”.

Además de las preocupaciones sobre el tamaño de la clase, los padres de los estudiantes de Pointer Ridge también enfatizaron el trauma emocional que otra transición escolar tendría en sus hijos después de la pandemia.

Marie Hinds-Kamara, una ex maestra de PGCPS, dijo que cerrar Pointer Ridge causaría daño emocional irreparable en sus dos hijos que asisten esa escuela.

“Si se cierra Pointer Ridge, entonces este será un cuarto proceso de transición para mis dos hijos que asisten a Pointer Ridge”, dijo Hinds-Kamara. “Para mi hijo…las transiciones son muy estresantes”.

Hinds-Kamara dijo que su hija, que está en primer grado, a menudo llora después de ver fotos de su escuela primaria anterior. La transición a otra escuela solo aumentaría este estrés, dijo.

McCarter reconoció las posibles consecuencias emocionales que causaría el plan en los estudiantes, pero dijo que el condado necesita equilibrar las mejoras necesarias con esta realidad.

“Existe un reconocimiento universal que el impacto socioemocional de la pandemia en los estudiantes ha sido significativo”, ella dijo. “La necesidad a largo plazo de estabilizar y modernizar los edificios en todo el distrito requiere decisiones difíciles en el corto plazo que se están considerando cuidadosamente”.

McCarter dijo que el equipo trabajará para encontrar un terreno común con los padres y los maestros.

“Realmente queremos entender cómo las familias sienten que pueden verse afectadas”, ella dijo. “Nos estamos esforzando por lograr el equilibrio adecuado entre las decisiones difíciles a corto plazo y los objetivos educativos y financieros a largo plazo del sistema”. 

La Junta de Educación del Condado de Prince George está programada para votar sobre la propuesta de límites el 10 de noviembre.