Este artículo fue traducido por Bridget Collins desde un reportaje de Sanya Wason. To read this story in English, click here.
El Procurador General de Maryland Anthony Brown publicó una guía esta semana para ayudar a las instalaciones de asistencia médica y los cuerpos policiales a obedecer las leyes de inmigración.
La guía, que sigue las 10 órdenes ejecutivas que hizo el Presidente de los Estados Unidos Donald Trump sobre la inmigración durante su primera semana en el mandato, enfatiza que los proveedores de asistencia médica y los oficiales de cuerpos policiales no preguntan sobre el estatus migratorio durante el trabajo rutinario.
“Ningún Marylander, independientemente del estatus migratorio, debería tener que elegir entre su salud y su seguridad”, escribió Brown en un comunicado de prensa el 28 de enero.
Trump ha prometido hacer deportaciones masivas durante su presidencia. Los agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos ya están arrestando a más personas, según la Associated Press.
A partir del 20 de enero, el gobierno federal ya no tiene una política en contra las investigaciones de ICE en las instalaciones de asistencia médica después de que la administración de Trump anulara las guías anteriores, dijo la dirección de Brown.
La guía tiene el objetivo de ayudar a la policía a gestionar la ejecución de inmigración “en una manera que genere confianza con las comunidades inmigrantes”.
Brown y 10 otros procuradores generales estatales publicaron una declaración colectiva el 23 de enero que decía que los cuerpos policiales municipales no serán “comandados” por ICE y continuarán investigando los crímenes, sin considerar el estatus migratorio del acusado.
La guía de asistencia médica aconseja al personal a anotar las credenciales de los agentes de inmigración y a contactar el asesoramiento legal cuando se les acerque ICE en una instalación. Los proveedores deben consultar con un abogado antes de revelar alguna información del paciente a los agentes, dice la guía.
El personal reserva el derecho de no contestar a las preguntas con relación a los pacientes bajo la Cuarta Enmienda, dijo la guía, pero no puede intentar ocultar a los pacientes ni tomar ningunas otras acciones que interfieran en las investigaciones.
Los proveedores de asistencia médica no tienen que permitir el acceso de ICE a las áreas restringidas a menos que los agentes tengan una orden judicial o “una prueba suficiente en ciertas situaciones de emergencia limitadas”, dijo la guía.
La dirección del procurador general motiva al personal de asistencia médica a entrenar a los empleados sobre cómo tratar las interacciones con los agentes de ICE, incluyendo informar a los pacientes de sus derechos.